Al ver esta fotografía pudieran pensar que me refiero a sus bien alicadidos pechereques, pero resulta que esta vez se trata de las llantas de su auto. De hecho, solo una.

Manejando su Mercedes blanco y acompañada de su asistente, a Spears se le reventó una llanta en Brentwood después de pasar por una farmacia. Con los paparazzi siguiendolas, continuo manejando con la llanta desinflada unas cuantas millas con las luces apagadas y hasta se pasó una estación de gasolina.

Fuente: People

Etiquetas: Britney Spears

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